“¿Cómo vamos a vivir los próximos cinco años?”

Palabras del Director Continental de la UPF
El Rvdo. Jung Soon Cho, Director Continental de América Latina y el Caribe de la Federación para la Paz Universal (UPF), hizo una breve visita a la Argentina. Era la cuarta vez que venía al país. La primera fue en el 2005, cuando se inauguró la UPF, el 11 de diciembre de ese año, y dos veces en el 2006, en las dos giras mundiales de la UPF. En su nueva estadía participó de una reunión que tuvo lugar el 25 de enero en la Sede de la Federación de Familias (Buenos Aires), donde compartió un mensaje, corto, pero muy significativo.

Habló de la civilización Maya y su calendario, confeccionado en base al estudio del firmamento, que anuncia el fin de los tiempos para el 21 de de diciembre de 2012. Que en la cultura china también hay un relato que fija el mismo plazo, conclusión a la que arribaron igualmente luego de observar los astros. Esta misma información se puede constatar en otras culturas, donde se da cuenta de grandes catástrofes. “Nosotros somos adultos. Nos hemos casado y ya hemos vivido, pero me produce preocupación por los niños. Entonces, ¿cómo vamos a vivir los próximos cinco años?”, reflexionó.

“Si nos fijamos en la Biblia, también habla de los Últimos Días, que es el período cuando viene el Señor de la Segunda Llegada. Jesús está ahora en alguna parte del mundo y tenemos que encontrarlo”, siguió. También que Sun Myung Moon habla de los Últimos Días, pero como un nuevo comienzo, donde acabará el sufrimiento de las buenas personas y cambiarán los malvados. En Últimos Días “tenemos que convertirnos en buenas personas, de conciencia” y construir el ideal que Adán y Eva no pudieron realizar en el Jardín del Edén, señaló. “Podemos llegar a formar una familia verdadera”, sentir felicidad y “hacer el trabajo de Dios” en estos cinco años que quedan hasta el 2012, expresó. Además, evitar que más jóvenes caigan presos del “mundo de maldad sin saberlo”: la droga, el Sida y la violencia.

“Todos los que estamos aquí deberíamos unirnos como si fuéramos uno solo para lograr esto, para conseguir que Argentina se convierta en una nación de Dios. En Argentina hay muchas personas, pero si los que estamos hoy aquí hacemos un cambio en nuestro corazón, seremos las personas más importantes. Entonces, reciban estas bendiciones”, finalizó su exposición en lengua coreana traducido por Omar Sabini. En realidad fue un mensaje muy breve, pero de profundo contenido, con un cuestionamiento dirigido a la conciencia y corazón de cada participante: “¿Cómo vamos a vivir los próximos cinco años?”

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